Cada civilización necesita una historia, una narrativa compartida en la que creer y la más poderosa de ellas es la religión. Pero ¿cómo y por qué la religión se convirtió en algo tan poderoso? Viajaremos al antiguo Egipto, una civilización que perduró a lo largo de 3.000 años bajo el poder de los faraones que consiguieron cohesionar a la sociedad gracias a la religión.